Hoy en la clase de historia: La Prensa Francesa

Patentada por primera vez en 1852 por los franceses Mayer y Delforg, contaba con un diseño distinto que no cerraba la parte superior del decantador y ya luego para el 1929 se patentó una versión más parecida a la que conocemos y disfrutamos hoy.

Algunos años después se hizo muy popular en Francia bajo el modelo “Chambord” que finalmente transformó a la Cafetera de Pistón o “Cafetera Clásica” en la mundialmente conocida PRENSA FRANCESA. Con la fama vinieron los rivalidades entre sus creadores y muchas marcas han intentado apropiarse de esta cafetera, aunque su simplicidad la ha llevado a trascender de su origen y sigue avanzando en mejores y más simples diseños de preparación.

¿Por qué se hizo tan popular?

Seguramente por su simplicidad y por su mayor sensación energética, esto porque a diferencia de la “italiana” o el “espresso”, en la ”Francesa” el café pasa más tiempo extrayendo aceites y cafeína. Tampoco olvidemos que es una preparación con un mayor volumen de agua lo que la hace más amable para la boca y el estomago.

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